... pues en un ángulo del sótano había un Aleph. Aclaró que un Aleph es uno de los puntos del espacio que contienen todos los puntos.
...Al abrir los ojos vi el Aleph:
-¿El Aleph?- repetí.
-Sí, el lugar donde están, sin confundirse todos los lugares del orbe, vistos desde todos los ángulos.
...Cerré los ojos, los abrí. Entonces vi el Aleph... ¿cómo transmitir a los otros el infinito Aleph, que mi temerosa memoria apenas abarca?... Por lo demás el problema central es irresoluble: la enumeración, siquiera parcial, de un conjunto infinito... Lo que vieron mis ojos fue simultaneo: lo que transmitiré, sucesivo, porque el lenguaje lo es. Algo, sin embargo, recogeré...
En la parte inferior del escalón, hacia la derecha, vi una pequeña esfera tornasolada, de casi intolerable fulgor...Cada cosa (la luna del espejo, digamos) era infinitas cosas porque yo claramente la veía desde todos los puntos del universo. Vi el populoso mar, vi el alba y la tarde, vi las muchedumbres de América, vi una plateada telaraña en el centro de una negra pirámide, vi un laberinto roto ( era Londres), vi interminables ojos inmediatos escrutándose en mí como en un espejo, vi todos los espejos del planeta y ninguno me reflejó...
...Dos observaciones quiero agregar: una sobre la naturaleza del Aleph, otra sobre su nombre. Éste, como es sabido, es el de la primera letra del alfabeto de la lengua sagrada, . Para la Cábala, esa letra significa el En Soph, la ilimitada y pura divinidad, también se dijo que tiene la forma de un hombre que señala el cielo y la tierra, À, para indicar que el mundo inferior es el espejo y es el mapa del superior; para la Mengenlehre, es el símbolo de los números transfinitos, en los que el todo no es mayor que alguna de sus partes...
El Aleph
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